Con la llegada del verano y el sol, las temperaturas se elevan y pueden convertir nuestro vehículo en un auténtico calvario por culpa del calor. Hoy en día el aire acondicionado es un elemento fundamental para cualquier coche, incluso por delante de acabados básicos.

Mantener el vehículo a una temperatura adecuada y cómoda es primordial para asegurar una conducción eficaz, por este motivo es muy importante comprobar que el aire acondicionado de nuestro vehículo funciona correctamente.

Si tu vehículo lleva un aire acondicionado convencional o si está equipado con un sistema de climatización más moderno, es muy importante que el gas refrigerante esté en perfectas condiciones. Si no se revisa cada cierto tiempo, puede que tarde más de la cuenta en enfriarse o incluso el sistema no podrá mantener una temperatura acorde.

Si tu aire acondicionado sufre alguno de estos síntomas, lo más probable es que debes efectuar una recarga de gas para que así pueda volver a funcionar correctamente. Puede haber alguna impureza o polvo en el circuito de refrigeración y poco a poco va perdiendo gas. El precio de una recarga de gas puede variar entre los 50 y 100 euros dependiendo de dónde se haga. Pero es recomendable que esta acción debe hacerse cada 2 o 4 años para llevar un correcto funcionamiento.

Si se ha comprobado y no existen fugas en el circuito del gas y el aire sigue sin funcionar, puede ser que sea a causa del compresor, este sistema se encarga de comprimir y descomprimir el gas refrigerante para que circule por todo el circuito o puede ser que la avería venga del condensador o de la válvula de expansión.

Otra posible causa puede encontrarse en la caja del climatizador. Esta pieza se encarga de impulsar el aire acondicionado y el aire caliente al interior. Si las trampillas que lo separan no están bien ajustadas puede reducir su eficacia.

Estas son las posibles consecuencias de un mal mantenimiento del aire acondicionado, un sistema que en muchos casos no le echamos cuentas y no lo tenemos en adecuadas condiciones.